El largometraje ‘La Niebla y la doncella’, rodada parcialmente en San Sebastián de La Gomera, en Valle Gran Rey, Parque Nacional de Garajonay e isla de Tenerife, se estrenará hoy en la sección oficial del Festival de Cine de Málaga.
Una trama que se desarrolla íntegramente en La Gomera y en la que se ven implicados tres Guardias Civiles llegados de la Península y otro ya destinado allí y su mujer.
Lugares tan conocidos de San Sebastián de La Gomera como la propia Plaza de La Constitución, los exteriores del Parador Nacional de Turismo o incluso el campo de fútbol municipal formarán parte de la trama. Una oportunidad única para dar a conocer el valor que entraña el municipio como plató de cine.
Su director, Andrés Koppel explicaba que La niebla y la doncella es “una clásica película policiaca” en la que se intenta descubrir quién ha cometido un crimen. Sin embargo, la cinta acaba profundizando “no tanto en el quién sino en por qué” y hablando de “soledad” y del “pesimismo” con el que se afronta la duda de “si es la justicia o es la venganza la que alivia a unos padres por la muerte de un hijo”.
Nuevas pistas sobre la muerte de ese hijo, un joven que apareció degollado tres años atrás, llevan a la Guardia Civil a reabrir un caso que se había cerrado con la rápida acusación a un político local que luego queda exonerado en el juicio. A La Gomera llegan el sargento Bevilacqua (Quim Gutiérrez), su compañera, la cabo Chamorro (Aura Garrido), y la cabo Anglada (Verónica Echegui), la última persona que vio con vida al joven asesinado. Allí los esperan el teniente Navas (Roberto Álamo) y su mujer Carmen (Marián Álvarez), embarazada de ocho meses. Ambos viven en la Isla con su hija de cinco años en la que aparentemente es una familia perfecta.