La Candelaria tiene nueva máquina para desintegrar cálculos del riñón con ondas de choque

De este modo el centro hospitalario potencia su servicio de Urología con una inversión de casi medio millón de euros, se indica en un comunicado en el que se añade que los profesionales sanitarios prevén realizar al año unas 300 pruebas de diversa índole en este servicio.

La introducción de este equipamiento supone un progreso en la calidad de los estudios e intervenciones, permitiendo abordar nuevas pruebas, como la observación de cálculos no radiopacos, que son aquellos que no son fácilmente visibles mediante ecografía, se añade en el comunicado.

En el primer mes de funcionamiento se han realizado quince procedimientos, entre litotricias y otras pruebas como uretrografía, cistografía, estudio video urodinámico o ureterorrenoscopia. Con este avance se prevé la realización de unas doscientas pruebas de litotricia al año y aproximadamente cien de otra índole.

El 95% de los cálculos renales en el uréter, comúnmente conocidos como piedras, se expulsan en torno a las tres o cuatro semanas, dependiendo de su tamaño y localización, y en los casos en los que la permanencia supera los dos meses es necesaria una actuación médica para facilitar su eliminación.

Actualmente, la mayoría de estos casos pueden resolverse mediante técnicas mínimamente invasivas, como la litotricia extracorpórea por ondas de choque, con la que se rompen los cálculos en pequeños fragmentos para que se puedan expulsar más fácilmente por la orina.