Detenida por resistirse a la policía tras chocar contra un coche y dar positivo en drogas
Una mujer ha sido detenida por resistirse a los policías locales que actuaron en un accidente de tráfico que provocó en el barrio de Piletas de Las Palmas de Gran Canaria y tras el que dio positivo por consumo de drogas.
Según han informado este viernes a EFE fuentes de la Policía Local de la capital grancanaria, la mujer "no llegó a golpear a los agentes actuantes, pero estuvo en el límite de hacerlo", motivo por el que se procedió a su detención como presunta autora de un delito de resistencia grave a la autoridad, previsto en el artículo 556 del Código Penal.
Según las fuentes consultadas, en la madrugada de este jueves, recibieron una llamada de un vecino de Piletas que decía que alertaba de que un vehículo se había chocado contra otro que estaba correctamente estacionado, por lo que unos agentes se personaron en el lugar.
Allí, practicaron los correspondientes test a la conductora del vehículo, que ya se mostraba poco colaboradora, unas pruebas que arrojaron un resultado positivo por consumo de drogas.
Como dicta el protocolo, los agentes procedieron a la retirada del vehículo, decisión ante la que la mujer mostró un comportamiento agresivo, con el que trató de resistirse a los agentes, a los que no llegó a agredir físicamente.
El Código Penal establece que este tipo de hechos pueden ser castigados con penas de prisión de tres meses a un año, o bien con multas de entre seis y 18 meses.
Según han informado este viernes a EFE fuentes de la Policía Local de la capital grancanaria, la mujer "no llegó a golpear a los agentes actuantes, pero estuvo en el límite de hacerlo", motivo por el que se procedió a su detención como presunta autora de un delito de resistencia grave a la autoridad, previsto en el artículo 556 del Código Penal.
Según las fuentes consultadas, en la madrugada de este jueves, recibieron una llamada de un vecino de Piletas que decía que alertaba de que un vehículo se había chocado contra otro que estaba correctamente estacionado, por lo que unos agentes se personaron en el lugar.
Allí, practicaron los correspondientes test a la conductora del vehículo, que ya se mostraba poco colaboradora, unas pruebas que arrojaron un resultado positivo por consumo de drogas.
Como dicta el protocolo, los agentes procedieron a la retirada del vehículo, decisión ante la que la mujer mostró un comportamiento agresivo, con el que trató de resistirse a los agentes, a los que no llegó a agredir físicamente.
El Código Penal establece que este tipo de hechos pueden ser castigados con penas de prisión de tres meses a un año, o bien con multas de entre seis y 18 meses.
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