Dermatólogos avisan que la práctica del "callo solar" aumenta el riesgo de cáncer de piel
El servicio de Dermatología del Hospital Universitario Nuestra Señora de La Candelaria ha advertido de los riesgos existentes en Canarias ante la exposición solar frecuente y, en concreto, de la errónea creencia en el "callo solar", que puede contribuir al envejecimiento cutáneo y aumentar el riesgo de cáncer de piel.
Así, los profesionales del área de Dermatología del centro hospitalario, adscrito a la Consejería de Sanidad, recomiendan en un comunicado el empleo de protector solar a diario y durante todo el día, pero sobre todo en horas centrales.
De igual manera, destacan el uso de protectores solares de amplio espectro (con protección +50), combinándolo con protección física como el uso de gorras y sombreros que protejan de la radiación solar directa.
En el caso de menores de seis meses de edad, la única protección recomendada es evitar la exposición solar directa.
También el equipo sanitario precisa que el uso de fotoprotección desde la infancia reduce significativamente el riesgo de desarrollar cáncer de piel y recuerda la importancia de buscar sombra siempre que sea posible.
Canarias posee uno de los índices de radiación ultravioleta más elevado, por lo que los especialistas insisten en la importancia de concienciar a la ciudadanía para evitar cometer errores como no emplear toda la cantidad de protector solar recomendada o la idea errónea de no aplicarlo en días nublados.
Estas tendencias afectan directamente a la piel y causan patologías como el cáncer de piel y el envejecimiento cutáneo, que busca prevenirse mediante cremas de cuidado facial, pero no mediante la fotoprotección diaria.
Para prevenir todo lo posible la aparición de estas patologías es muy importante extremar la precaución, sobre todo, en la población infantil, puesto que el daño solar se acumula desde la primera exposición a la radiación ultravioleta, puntualizan los dermatólogos.
Asimismo, las personas mayores también deben aumentar su protección, puesto que han acumulado el daño solar con los años y esto les predispone más al padecimiento de cáncer de piel.
Al respecto, indican que el melanoma posee una mayor carga genética, lo que implica que tiene una aparición más temprana en la vida, en torno a los 50 o 55 años, en comparación con el cáncer cutáneo no melanoma, que está más relacionado con la exposición solar crónica, y aparece a una edad mayor, de 65 años de media.
Además en los últimos años ha cobrado protagonismo un concepto conocido como “callo solar”, una creencia errónea que afirma que al exponerse al sol con frecuencia la piel se endurece o broncea y ya no necesita protección.
Sin embargo, avisan los especialistas, aunque la piel se broncee sigue sufriendo daño acumulativo por radiación ultravioleta, lo que aumenta el riesgo de envejecimiento prematuro y de aparición del cáncer de piel.
Así, los profesionales del área de Dermatología del centro hospitalario, adscrito a la Consejería de Sanidad, recomiendan en un comunicado el empleo de protector solar a diario y durante todo el día, pero sobre todo en horas centrales.
De igual manera, destacan el uso de protectores solares de amplio espectro (con protección +50), combinándolo con protección física como el uso de gorras y sombreros que protejan de la radiación solar directa.
En el caso de menores de seis meses de edad, la única protección recomendada es evitar la exposición solar directa.
También el equipo sanitario precisa que el uso de fotoprotección desde la infancia reduce significativamente el riesgo de desarrollar cáncer de piel y recuerda la importancia de buscar sombra siempre que sea posible.
Canarias posee uno de los índices de radiación ultravioleta más elevado, por lo que los especialistas insisten en la importancia de concienciar a la ciudadanía para evitar cometer errores como no emplear toda la cantidad de protector solar recomendada o la idea errónea de no aplicarlo en días nublados.
Estas tendencias afectan directamente a la piel y causan patologías como el cáncer de piel y el envejecimiento cutáneo, que busca prevenirse mediante cremas de cuidado facial, pero no mediante la fotoprotección diaria.
Para prevenir todo lo posible la aparición de estas patologías es muy importante extremar la precaución, sobre todo, en la población infantil, puesto que el daño solar se acumula desde la primera exposición a la radiación ultravioleta, puntualizan los dermatólogos.
Asimismo, las personas mayores también deben aumentar su protección, puesto que han acumulado el daño solar con los años y esto les predispone más al padecimiento de cáncer de piel.
Al respecto, indican que el melanoma posee una mayor carga genética, lo que implica que tiene una aparición más temprana en la vida, en torno a los 50 o 55 años, en comparación con el cáncer cutáneo no melanoma, que está más relacionado con la exposición solar crónica, y aparece a una edad mayor, de 65 años de media.
Además en los últimos años ha cobrado protagonismo un concepto conocido como “callo solar”, una creencia errónea que afirma que al exponerse al sol con frecuencia la piel se endurece o broncea y ya no necesita protección.
Sin embargo, avisan los especialistas, aunque la piel se broncee sigue sufriendo daño acumulativo por radiación ultravioleta, lo que aumenta el riesgo de envejecimiento prematuro y de aparición del cáncer de piel.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.139