Curbelo, el sostenible
Casimiro Curbelo se ha convertido en un hombre sostenible, y no solo porque sea él quien sostenga el llamado “pacto de las flores”. Hablo de medio ambiente y políticas más limpias. Lo que nunca se ha hecho en la isla y a la que se destinan ahora 8 millones en el presupuesto. Ahí es nada.
![[Img #71493]](https://gomeraverde.es/upload/images/12_2019/4684_6400_00-b.jpg)
La palabra sostenibilidad cobra un nuevo sentido con él, en una isla donde abundaban los vertidos ilegales y escombreras, donde la recogida selectiva es aún un niño que empieza a andar, ahí esta él para explicarnos sus razones. Total, se destinarán 2,5 millones (400 millones de pesetas más o menos) a vehículos eléctricos para el Cabildo y para poner puntos de recargas. Esperemos que funcionen mejor que los de Hermigua, aunque también nos vendió placas fotovoltaicas para el mamotreto del Spa de Santa Catalina, que está cerrado y cada día amenaza más la ruina.
Este lunes, en unas declaraciones recogidas por el Cabildo, hace un llamamiento dentro de la Cumbre del Clima que se celebra en Madrid en pos de la sostenibilidad. Y lo hace refiriéndose al entendimiento entre países, a la alarma de la llegada de microplásticos o a la subida del mar. Y yo me pregunto por qué no le invitaron. Él sería como la niña Greta Thunberg, que cruza el Atlántico en bote para no contaminar y alzar su voz en la Cumbre madrileña, pero en versión Colón, partiendo desde la Villa de San Sebastián rumbo a las Américas. Esperemos que, en lo referido a lo colombino, al menos abra los monumentos. Ya solo por vergüenza.
Marinero en tierra.
La palabra sostenibilidad cobra un nuevo sentido con él, en una isla donde abundaban los vertidos ilegales y escombreras, donde la recogida selectiva es aún un niño que empieza a andar, ahí esta él para explicarnos sus razones. Total, se destinarán 2,5 millones (400 millones de pesetas más o menos) a vehículos eléctricos para el Cabildo y para poner puntos de recargas. Esperemos que funcionen mejor que los de Hermigua, aunque también nos vendió placas fotovoltaicas para el mamotreto del Spa de Santa Catalina, que está cerrado y cada día amenaza más la ruina.
Este lunes, en unas declaraciones recogidas por el Cabildo, hace un llamamiento dentro de la Cumbre del Clima que se celebra en Madrid en pos de la sostenibilidad. Y lo hace refiriéndose al entendimiento entre países, a la alarma de la llegada de microplásticos o a la subida del mar. Y yo me pregunto por qué no le invitaron. Él sería como la niña Greta Thunberg, que cruza el Atlántico en bote para no contaminar y alzar su voz en la Cumbre madrileña, pero en versión Colón, partiendo desde la Villa de San Sebastián rumbo a las Américas. Esperemos que, en lo referido a lo colombino, al menos abra los monumentos. Ya solo por vergüenza.
Marinero en tierra.
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