¿Dónde está mi Paquete...?

Imagínese: usted paga su dinero, lo da por adelantado, compra y no llega. Y meses después no sabe dónde está su dinero o su producto. Y la respuesta de correos es una milonga de que hay un problema con “la adaptación al nuevo tratamiento de la normativa aduanera, en relación al comercio electrónico”. Pero a mí y a miles de personas ¿qué carajo nos importa...? ¿Dónde están nuestros paquetes, envíos y nuestro dinero?

Un paquete, en territorio peninsular, tarda menos de dos días en llegar a destino. ¿Qué pasa con Canarias? Pues nos han contado (y esto va a llegar a pregunta en el Senado), que Correos no ha sabido adaptarse al cambio digital y ahora, los empleados tienen miles de paquetes por calificar y enviar, por falta de recursos. Y yo, y miles de canarios, esperando por el paquete.

Y lo mío es una bobería. ¿Se imaginan a la cantidad de pequeños empresarios que han pedido sus mercancías, pagadas por adelantado, para su negocio, confiando en la gestión de una institución del Estado, Correos, que nos cuesta dinero a todos?  Leche de cacharro. Se han quedado con el trasero al desnudo, como dicen los colombianos, con “el cuatro letras el descubierto”.

O sea: cientos de empresas te dicen que ni se molestan en enviar sus pedidos a Canarias (que, esa es otra...), y encima, las que las mandan, por correo, se encuentran con este chanchullo. Y luego dicen que no estamos lejos y que estamos bien comunicados. Y un pimiento. Estamos olvidados, alejados y pagamos los mismos impuestos. Y con todo más caro. De verdad, a veces te dan ganas de borrarte...